Las pruebas de “primero en su tipo” y de “práctica común” forman parte de la misma prueba de adicionalidad por el que cada proyecto potencial del MDL tiene que pasar.
El primero-de-su-tipo
La norma del primero de su clase, en virtud del MDL, indica que un proyecto se considera automáticamente adicional si:
(a) El proyecto es el primero en el área geográfica en el que se aplica una tecnología que es diferente a cualquier otra tecnología capaz de ofrecer el mismo resultado y cuya operación comercial hubisese comenzado en el área geográfica de aplicación antes de la fecha de inicio del proyecto
(b) Los participantes en el proyecto han seleccionado un periodo de acreditación no renovable de 10 años para la actividad del proyecto.
El rigor de esta regla depende de cómo “la región geográfica” se define y cómo la tecnología se defina como “diferente” de las tecnologías similares. Si estas definiciones son demasiado limitadas, muchos proyectos podrían ser definidos como primeros-de-su-tipo y automáticamente se considerarán adicional. Para la captura y almacenamiento de carbono (CCS), por ejemplo, significaría que cada planta de CCS por primera vez en un determinado país sería adicional de forma automática, incluso si la decisión de inversión se hiciera independientemente del MDL.
Práctica Común
El análisis de la práctica común es parte de la prueba de adicionalidad y pretende ser una comprobación de credibilidad para determinar si el tipo de proyecto propuesto (por ejemplo, tecnología o práctica) se ha convertido en una práctica común en el sector correspondiente y de la región. La cuestión aquí es que la prueba de una práctica común excluye la consideración de cualquier otro proyecto que este registrado en el MDL o se solicite la aprobación del MDL.
Si la mayoría de los proyectos no son adicionales, pero todos están no obstante aplicando para registrarse en el MDL, la prueba de una práctica común no puede servir como una verificación de credibilidad eficaz, ya que todos los proyectos pasarán, aunque pocos o ninguno sean adicionales al final. Este es el caso por ejemplo en lugares donde una transición hacia tecnologías más eficientes ya esté en marcha por razones no relacionadas al MDL (véase, por ejemplo, proyectos de centrales de carbón).
Para contrarrestar la debilidad que la prueba de práctica común demuestra, se necesitaría hacer una distinción entre las situaciones y tipos de proyectos en los cuales se justificaría una exclusión o no de proyectos MDL .
Por ejemplo, cuando la tecnología del proyecto es mucho menos atractiva económicamente que las alternativas de referencia, las normas actuales para la exclusión de proyectos MDL pueden tener sentido. Sin embargo, cuando no hay barreras decisivas que difieran entre el proyecto y sus alternativas de línea de base y sólo mínimas diferencias en el rendimiento económico, los proyectos del MDL deben ser incluidos en la línea de base.
Recomendaciones de CDM Watch sobre Primero-de-su-tipo y la prácticas común (pdf-file, Agosto 15, 2011)
Enlaces externos útiles:
- Directrices sobre la adicionalidad de actividades de proyectos primera de su clase
- Directrices sobre la práctica común
- Directrices de la CMNUCC sobre prácticas de Primero-de-su-tipo y la Práctica Común (enlace externo)